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martes, 23 de diciembre de 2014

Alguna sale

Este fin de semana tuve un rato por la tarde para salir a pescar y aunque un poco tocado por la juerga del día anterior allá me fui a ver si sonaba la flauta. Poco viento y algo de mar, soleado, no tenía mucha fe en que picaran visto lo visto últimamente. Sin embargo nada más llegar una picada fallida me puso en alerta. Al poco tiempo picada potente y tirones bruscos que me hacen pensar en un robalo, aflojo freno y lo voy trayendo echo sacadera y quedo sorprendido pues solo era de dos kilos y parecía bastante mayor, que manera de tirar, gordita y hermosa. Picó a un vinilo casero que funcionó muy bien.




 Tras un rato sin picada, nueva pasada y picadón, parece aún mayor que la otra y tras unos segundos de pelea a medio camino, cuando ya creí que la tenía, se suelta, mala suerte, a veces también ellas ganan...gracias a dios. Continue pescando y al rato una kilera me dio una nueva alegría, tras eso ni una picada más, tocaba volver después de una tarde entretenida.








                                      Este fue el que me ayudó en las capturas, vinilo casero


martes, 16 de diciembre de 2014

Más sargos

Seguimos sin localizar robaliza, no solo nosotros, si no también varios amigos que pescan por las mismas zonas, únicamente un par de kileras en zonas abrigadas del interior de la ria, tal y como decía Vitu en su blog.  El otro dia en compañía de Juanca lo intentamos nuevamente toda la mañana sin picada hasta que la paciencia dijo basta, y eso que tengo muuuucha, pero sabiendo que los sargos  están entrando era mucha la tentación, asi que armados con miñoca y mejillón dedicamos tres horitas de la tarde a esta entretenida pesca y vaya si nos divertimos........por lo menos disfrutamos del día de pesca, en espera de los robalacos......si los hay....






lunes, 24 de noviembre de 2014

Variado

El viernes hicimos una escapadita mi amigo Juanca y yo  con la intención de pescar unas lubis. Salimos temprano y a primera hora estábamos dándole a jigging y a viniling. Pasaba el tiempo y no teníamos picada, tan solo algún xurelo suicida que se tiraba al jig y alguna caballa al vinilo. Tras un par de horas sin acción, cambiando frecuentemente de sitio, por fin Juanca clava una, las cabezadas inconfundibles nos dan la confirmación de que había picado una lubina, la subimos a bordo y nos animamos pensando que habría alguna más. Continuamos intentándolo durante horas por innumerables sitios y el resultado fue el mismo, nada de nada. De camino me encontré con mi amigo Javier que en compañía de otro amigo estaban pescando por una zona cercana pero con el mismo resultado. Hartos de dar palos al agua decidimos cambiar totalmente de plan,  llevaba unas cajas de miñocas, por si acaso, y pusimos rumbo a los sargos. La elección fue un acierto pues nada más llegar a la piedra las picadas se sucedían una tras otra, una docena de sargos, petas, doncellas, maragotas y hasta un  buen ballesta, nos hicieron pasar un buen rato hasta que se nos acabó el cebo y decidimos volver a la carga con las lubis, esta vez en rompiente y con vinilos, pero con el mismo resultado que a la mañana, cero patatero. Cansados de lanzar gomas al agua cambiamos nuevamente el plan y de regreso paramos a los calamares, y aunque no dieron tanto la cara como días atrás sirvió para que Juanca se estrenara en esta pesca y de paso me pusiera el barco perdido de tinta con un buen choco que sacó. Al final media docena de calamares y un par de chocos sirvieron para poner punto final a una jornada larga muy currada y que acabó mejor de lo que parecía. Eso si, las lubis siguen desaparecidas.......



                                                 Disculpas por la foto "cocina" de parte de las capturas pero en esta ocasión no hicimos reportaje en condiciones

jueves, 20 de noviembre de 2014

Calamares

Esta complicada la cosa, los pocos huecos que hay para salir no dan los resultados esperados, ayer lo intenté unas horas, pero menudo Marón, tanto, que tras unos pocos lances decidí darme media vuelta  e ir a sitios más resguardados y es que la cosa no estaba para coñas, por la mañana un barco profesional naufragó y casi hay una desgracia. De vuelta paré en la ria a pescar unos calamares, llevaba tiempo queriendo volver a pescarlos pero siempre se me hacía tarde asi que era el momento adecuado y........los encontré y lo pasé muy bien...como tiran los gordos.........



miércoles, 29 de octubre de 2014

Doble salida

El fin de semana pasado hice una doble salida mañanera el sábado y el domingo con muy distintos resultados. El sábado en compañía de Javier salimos temprano para jiggear y vinilear un poco por las zonas que nos estaban dando capturas últimamente. Lances por aquí lances por allá y ni picada. Tras un par de horas sin actividad ninguna después de haber cambiado unas cuantas veces de zona, nos fuimos a buscar abadejos a zonas más profundas con exactamente el mismo resultado, nada de nada. Con la mañana ya bien avanzada cambiamos radicalmente de zona y nos fuimos a los alrededores de Cies donde continuamos intentándolo, vimos un bonito saltar y nos animamos pensando que podría entrarnos alguno, pero nada. Continuamos costeando lanzando por muchos sitios y lo mismo, solo algún abadejo pequeño y algún xurelo nos animaba el dia, el calor era muy fuerte y el dia pintaba más que mal asi que a la hora de comer decidimos poner fin a la jornada con un buen !!!! bolo carolo !!!!.

Visto el resultado del sábado el domingo decidimos cambiar el plan, invitados por Kike nos fuimos a tentar a los sargos a fondo.  Nada más llegar las picadas se sucedían una tras otra, no era la historia del sábado, tanto, que a las dos horitas habíamos acabado con las coreanas que llevábamos y nos dimos por satisfechos con las capturas. Dedicamos el final de la mañana a  hacer un poco de jigging y tuvimos la suerte de sacar un robalito,  unos cuantos jureles y la anécdota del dia, Javier enganchó un calamar al jig rosa. Al final pesquita variada y entretenida, no se puede pedir más en estos días tan veraniegos, en espera de los temporales.....


 
 




martes, 21 de octubre de 2014

Lubis otoñales

De nuevo en  compañía de Juanca con el que viví hace unos días una magnífica jornada salimos a ver si pescábamos alguna. Salida de mañana con muuuuucho mar de fondo y poco viento en la previsión aunque como suele ser habitual fallaron al principio pues hasta las doce mas o menos nos acompañó un viento Este moderado. No pintaba mal la cosa y las picadas no se hicieron esperar, como en los últimos días triunfaron más los jigs, y en un par de horas ya habíamos cogido varias, dos de ellas bastante decentes, algunos jureles buenos también entraron al jig. a  medida que pasaban las horas dejaron de picar y desde el mediodía recorrimos un buen tramo de costa sin picada aunque con un sol abrasador impropio de esta época y el agua a 20 grados !!!!!!! a eso se sumaba que el mar iba a menos con lo que las esperanzas de pillar alguna más se fueron desvaneciendo. Al final una pesquita maja de lubis que ya me gustaría tener todos los días.....





jueves, 16 de octubre de 2014

Dos más

Tras la tremenda jornada del sábado, dia inolvidable de pesca, el domingo me desperté sin intención de ir a pescar la previsión era mala y estaba cansado, pero cuando miro el windgurú Sorpresa!!! la surada que daban ya no estaba y en su lugar ponían poco viento y un mar más que aceptable, asi que quedé con mi amigo Javier y allá nos fuimos de nuevo pensando si aún estarían las del dia anterior. De camino al pesquero el mar no nos parecía tan bueno como estaba previsto, un viento norte bastante desagradable unido a un mar de fondo del Oeste hacia que el meneo fuese considerable y que el error en las previsiones bastante grave, como, por cierto, suele ocurrir con mucha frecuencia últimamente. Al llegar a la zona la nortada era fuerte y se hacía difícil jigear, con el motor encendido y a base de meter marcha atrás para derivar lo menos posible sobre fondos de 40 a 60 mts conseguimos echar unos lances decentes pero la cosa no estaba como el dia anterior, tras una horita de pesca sin picadas, Javier clavó la primera, un robalete guapo de casi dos kilos que nos animó a continuar. Al cabo de un rato y con el viento en aumento, me entró en el jig color sardina a mi otra mayor que tuve la  fortuna de sacar, un robalo de 3,5 kgs que me recompensó el esfuerzo que estábamos haciendo simplemente para mantenernos en pie. Que gordas y fuertes están, llenas de patexo hasta arriba.
Al cabo de un rato la nortada se hizo insoportable y tras constatar que la previsión era una tremenda cagada y que no había visos de cambiar decidimos dar por concluida la jornada y volver a puerto. Suele pasar que cuando vas con muchas expectativas..........malo, aunque en esta ocasión aunque no fue un gran éxito no estuvo nada mal, ya me gustaría que todas las salidas se saldasen con dos piezas asi en tres horitas de pesca. Que siga la racha, plisssss
 
Material empleado:
 
- Caña Illicium SW 210, carrete shimano twin power 4000, trenzado power pro 19mm. Bajo fluorocarbono seguar 0,43 mm.
 
- Caña caperlan jig start 5.5, carrete Khaos 50, trenzado power pro 0,22 mm. Bajo fluorocarbono seguar 0,43 mm.
 
- Jigs: maria color sardina 100 grs, riversea2 150grs, fishus 150grs plata.
 
 
 
 
 
 
 

 
 

lunes, 13 de octubre de 2014

Ya están aquí....







Por fin dimos con ellas. El sábado salida de pesca con mi amigo Juanca con la idea de hacer un poco de jigging y de viniling a ver si dábamos con alguna. Mientras íbamos de camino Juanca bromeaba, que si hoy pillamos muchas, que si hoy es el dia, que si hoy cogemos un robalaco, etc....yo le miraba y me decía, hombre la época es buena, el dia está pesquero, peeeero, llevo tanto tiempo sin hacer una pescata de lubina que me parecía complicado, muy complicado. Una vez llegamos a la zona elegida comenzamos con jigs de 100 y 150 grs pues el barco derivaba algo con el viento y necesitábamos algo de peso para llegar bien al fondo. Comenzamos en una zona donde hace unos días un gran robalo me partió el hilo, y a la media hora más o menos me entró la primera, una bonita lubina que no llegaba a los dos kilos, tras un buen rato más sin picadas decido desplazarnos un poco y empezamos a darle en otro sitio, nada más llegar empezó la fiesta, cada pasada cogíamos una o dos, incluso hubo un momento en que llegamos a tener tres clavadas al mismo tiempo, pues yo al principio llevaba el jig acompañado de un vinilo. En medio de una orgía de picadas a Juanca se le dobla la caña a lo bestia y empiezan las cabezadas, este es bueno me dice, tras unos minutos de intensa lucha conseguimos sacarlo del agua, 5,5 kgs de robalo, abrazos y felicitaciones, el dia era redondo. Pero continuamos pescando y no acabó ahí la cosa. Viendo que picaban y que el viento iba a menos decidí empezar con los vinilos y un equipo más ligero, puse un black minow con cabeza de 40grs y a los pocos minutos picadón brutal que me dobla la caña a tope, pega una tremenda carrera que me hizo dudar de si sería un bonito y tras pararla empiezan los cabezazos, poco a poco la fui trayendo hasta que la vimos en superficie, otro robalaco de 6 kilos, para flipar. Exultantes y alucinados por lo que estábamos viviendo a Juanca le vuelve a picar otro, este parece un tranvía, le saca hilo a lo bestia, violentamente, con el freno bastante apretado, y cuando se dispone a aflojarlo un poco, PLAC, rompe el hilo, mala suerte, era otro bicho seguramente aún mayor que los que sacamos.  Al final pescata de las buenas y es que octubre y noviembre..............



 
 
 
 











 
 
 
 

lunes, 29 de septiembre de 2014

Visita asturiana

Dos buenos amigos de Asturias, Tino y Ben, compañeros de fatigas y alguna que otra alegría tras los salmones vinieron a visitarme hace unos días. El plan era que conocieran la pesca desde embarcación, un poco de spinning y un poco de jigging. El primer dia llegaron con el tiempo justo para ir a dar unos lances a las lubis pues el dia era bravillo, con bastante mar y viento, y era la pesca más propicia. Salimos de puerto y nada más doblar el espigón maretón importante que impresionó a los invitados, poco bregados en estas lides. Una vez pasado el agobio inicial y viendo que el barco no se rompía (como temía Tino, jajaja), pusimos rumbo al pesquero donde empezaron a dar varadas con los vinilos, pesca nueva para ambos y en la que se defendieron más que dignamente teniendo en cuenta que las condiciones no eran nada cómodas y las picadas se hacían de rogar. Al final tras un par de horitas de lances Ben clavó una peque que nos quitó el bolo de encima y sirvió para que comprobaran que el método funciona, aunque no como nos habría gustado.



Volvimos a puerto, con el mar más tranquilo y al llegar  hicimos una buena pescata, y es que, !!como picaban al lado del pantalán!!!.........una tras otra sin parar, increíble!!!!!



 
 
Al dia siguiente la previsión era muchísimo mejor y nos fuimos mar adentro para hacer jigging profundo (sobre 100mts) tras los abadejos. Hacía un poco de aire pero un tremendo corrientón que superaba a la deriva del viento, pesca complicada pero decidí que pescaran ellos mientras yo me dedicaba a colocar el barco en posición a golpe de motor. Poco a poco las picadas se fueron sucediendo a los jigs de 150 a 200grs y fueron saliendo abadejos kileros que nos hicieron la jornada entretenida, eso sí, aderezada de vez en cuando por los vómitos de Ben que aguantó cinco horas mareado como un campeón, que duro es este hombre. Como anécdota Ben tuvo tremenda clavada en el fondo que al empezar a subir pensamos que sería un abadejón de varios kilos, pero que al llegar a la superficie nos sorprendió con dos abadejos guapos clavados en el jig y en un vinilo y el hilo enredado en un precioso coral de color amarillo, no me extraña que tirara!!!!
 
 
 
 
 
 
Al final una gratísima experiencia la visita de mis buenos amigos y aunque la pesca no fue gran cosa lo pasamos de miedo navegando, pescando, comiendo, bebiendo , se repetirá.
 
 
El tema lubinero  por mi zona anda parado, al menos para mi, el otro día tuve un rato por la tarde para acercarme unas horitas con el mar como a mi me gusta, olas de 2 a 4 mts, y aunque la cosa prometía solo fui capaz de sacar tres kileras que por lo menos me salvaron una vez más de un bolo más que cantado. A ver si se anima esto que se acerca  mi época favorita.......
 
 
 
 
 
 
 
Vinilos empleados ese día
 
 
 

miércoles, 10 de septiembre de 2014

De vuelta.....

Se acabó lo bueno, vuelta al trabajo pero también vuelta a la pesca un poco más en serio de lo que hice en agosto, en que me dediqué básicamente a meter el gusanillo a las nuevas generaciones con bastante éxito. Mi hijo Leo pudo estrenarse con los chocos, y con los vinilos pequeños menudo estilo que tiene, ya le gustaría a muchos mayores que conozco........ para muestra....




Yo por mi parte hice algunas pescas variadas aunque centradas más bien en los abadejos pues las lubinas estaban desaparecidas los días que fui, cierto es que las condiciones no eran las adecuadas con mar como un plato y ambiente veraniego, pero también es verdad que en días asi alguna sorpresa me he llevado, aunque pocas.

La semana pasada en compañía de mi amigo Miguel, gran mosquero y pescador de salmón, fuimos una tarde a jigear un poco en busca de abadejos. De camino paramos un rato en unos bajos lubineros y Miguel tuvo la suerte de clavar una kilera en los primeros lances con el ultra eel, ninguna picada más, con el mar plato ya me parecía bastante. Al llegar al pesquero euipados de jigs de 100 grs y escabelas tuvimos la suerte de dar con unos cuantos abadejos incluyendo uno majo que nos hicieron pasar una tarde entretenida. Al volver parada de nuevo en el sitio de la lubina y picada buena al crazy eel de fiiish, una chopa kilera, que por lo que tiraba pensé que sería un robalito. La verdad es que este señuelo que el primer dia no me gustó nada cada vez me convence más y para lo poco que lo utilizo debo reconocer que da bastante pescado. Seguiré probando.

 
Este fin de semana tuve una tarde libre asi que volví a la carga, la cosa no pintaba bien pues el dia era como casi todos, muy veraniego. aún asi decidí ir a dar un paseo y probar por la zona donde antes del verano pesque un gran abadejo. Dos o tres horas lanzando aquí y alla, en todoi tipo de profundidades, desde los 15 mts hasta los 60 mts, usando jigs, vinilos, y nada de nada, ni una mísera caballa, increíble. Aburrido y asumiendo un más que probable bolo, cambié el chip y decidí ir de exploración, ya que no picaba nada por lo menos dar un paseo a ver si veía algún sitio nuevo. Me alejé unas 4 millas más mar adentro en busca de fondos de 100 mts y al llegar a una zona en la que la sonda parecía marcar levemente un fondo de piedra monté un jig de 150 grs con una escabela y  a pescar. Nada más llegar al fondo picadón brutal doy a clavar y parece que se suelta vuelvo a notar picada y ahora si lo voy subiendo lentamente. Desde 100 mts la sensación es muy fuerte, no apto para problemas de espalda,  a los tirones del pez hay que sumarle la presión del agua, y tras unos interminables minutos llega arriba entregado un abadejo de kilo y medio enganchado en la escabela, perooooo, sorpresa!!!!,  sin el jig, algo me había partido el flurocarbono del 40, posiblemente estaba tocado. Flipando por la experiencia en el primer lance, monté otro jig y vuelta a empezar. Tras varias capturas más,  en una bajada noto una retención como la del primer lance, el jig se para en seco y me mete varias carreras, ahora si que me ha picado un bicho, con cuidado y lentamente va subiendo, hasta medias aguas las embestidas son curiosas. Al llegar arriba flipo, tremendo abadejo de casi 5 kilos acompañado de otro de unos 2 kilos en la escabela, con razón me tiraba tanto.  Más abadejos, un cabracho y otro doblete con uno de 3 kilos y decidí dar por terminada la jornada. Feliz por el descubrimiento, buena opción para los días de calma chicha. La Fe , la Fe...........
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

miércoles, 23 de julio de 2014

Salmones de Irlanda (Irish salmon)

La semana pasada viajé a Irlanda. Hacia ya tres años que no iba y las ganas por volver eran muchas. En compañía de mi amigo Julio marché con la esperanza de clavar algún salmonin de verano, allí llamados grilses, salmones pequeños en tamaño (de kilo a tres kilos) pero enormes en pelea. Auténticas flechas plateadas que por la proximidad al mar de los cotos que pescamos tienen una bravura incomparable, electrizante, lo más parecido en nuestras aguas sería un reo recién entrado de igual tamaño, pero aún asi creo que estos salmones lo superan. Teniamos varios cotos por la zona Norte y las jornadas se presentaban intensas  pues normalmente pescamos desde las 6 de la mañana hasta las diez de la noche, haciendo, algunas veces, pequeñas paradas para reponer fuerzas.
 
Primer dia: estábamos ansiosos y al llegar al rio se veían numerosos salmones bañándose y saltando por lo que los nervios iban en aumento. Empezamos calando el cebo (quisquilla) y nada más empezar clavé uno de kilo y algo, que fue devuelto inmediatamente al agua. A los cinco minutos otro, este mayor, pero en plena pelea, frenética como siempre, se suelta. Tras varias picadas más sin éxito cambiamos de lugar.  Durante unas cuatro horas más, varios clavados y todos se soltaron, a Julio le partieron el hilo dos. Al final tuvimos que marcharnos pues por la tarde teníamos otro buen coto en el Moy y el mejor momento era la primera hora por tema de mareas. Después de muchos salmones en la caña nos fuimos casi bolo, la cosa no empezaba muy bien.  Por la tarde en el Moy pesca exclusiva a mosca con caña de dos manos, pescamos otras cuatro horas y solo tuve una picada, nadie pescó nada. Primer dia un solo salmón pescado pequeño.
 
 
 
Segundo día: las lluvias nocturnas propiciaron un pequeño aumento de caudal, algo fundamental en Irlanda pues los salmones pican muy bien cuando sube el nivel y cuando empieza a bajar, y fuimos testigos de una espectacular remontada de salmones. Nos pusimos a la faena y a los pocos minutos Julio clavó un buen salmón a cebo que se le soltó tras unas carreras. Estábamos en un buen coto para la caña de mosca de una mano por lo que nos pusimos a ello. Julio pescó uno kilero a mosca dando una bonita pelea. Para mi fue quizá el mejor dia de pesca a mosca de mi vida con doce salmones clavados, uno de tres kilos que tras quince minutos de lucha se soltó en la sacadera, y varios más decentes. Realmente alucinante como tiran y pelean estos pequeños torpedos, dificilísimo sacarlos con las pequeñas moscas de verano. El balance final del día fue tres pequeños devueltos, y Julio pescó dos  kileros.
 
Tercer día: con un pobre balance de capturas, no de picadas y sensaciones, con cara de tonto por lo que tuve en la caña y no conseguí sacar, afrontamos la tercera jornada con una presión añadida pues la posibilidad de volver casi de vacio cada vez era más cierta, algo que ya nos ha pasado en otra ocasión, y es que en Irlanda la pesca suele ser muy radical, en determinados momentos y condiciones (marea, caudal, clima...) puede resultar hasta fácil, mientras que la mayoría de las veces es bastante frustante y desesperante,  ves como se bañan cientos de salmones delante de ti sin que ninguno se digne a tomar cebo alguno, increíble pero cierto. Aunque no es nuestro cebo favorito, este dia aseguramos con algo más efectivo aunque también más proclive a picadas de pequeños salmones, la miñoca. El resultado fue que ambos hicimos el cupo con dos salmones cada uno y nuestras caras cambiaron por completo.
 
 
 
 
                                                                                                                                                                                                                                        Cuarto dia:  con los ánimos repuestos tras la exitosa jornada anterior, regresamos a la acción con el mismo plan, los nervios más templados y unas buenas condiciones hicieron que al poco tiempo Julio ya tuviera sus salmones pescados, y yo tras unas horas de pesca por fin conseguía mis preciados trofeos. Se acababa el viaje y teníamos que regresar a Dublín para volar a casa, una sensación agridulce nos embargaba, por un lado por los buenísimos momentos pasados, algunos espectaculares, y por otro la tristeza de no poder continuar otro día y otro y otro y otro, hasta el año que viene, si se puede.
 
 
 
 
 
 
 

jueves, 3 de julio de 2014

Pez espada y atunes en las rias

Cada vez vemos más especies foráneas en nuestras aguas, seguramente por el cambio climático que parece imparable desgraciadamente sin que ningún gobierno haga nada hasta que probablemente sea demasiado tarde. Os pongo enlaces a noticias aparecidas estos días en la Voz y en el Faro, en aguas de A Lanzada se capturó un atún de 25 kilos al lado de la playa y en la ria de Vigo por la isla de san simón tres, si tres, peces espada, peces de aguas profundas y mares abiertos.................
 






http://www.farodevigo.es/gran-vigo/2014/06/29/nay-hay-registros-especie-aguas/1049882.HTML


http://www.lavozdegalicia.es/noticia/sociedad/2014/06/25/capturan-atun-25-kilos-playa-lanzada/0003_201406G25P30995.htm

lunes, 30 de junio de 2014

Reos y algo más

De nuevo fuimos Julio y yo a tierras asturianas a tentar al salmón a mosca y a los reos al atardecer. De salmón nada de nada, pero en compañía de Héctor y Tino echamos unas varadas muy guapas con la caña de mosca de dos manos. Al atardecer como siempre fuimos a corrientes y pozos de reo donde tuvimos más fortuna. Enganchamos algunos en el sereno con las ahogadas y cuando dejaron de cebarse alguno más con el streamer, muchas picadas fallidas pero al final entre los tres pillamos estos reos guapus y un truchón........





 
 
 
El segundo dia no se dio tan bien pero tampoco hubo queja



 
Tras la visita a Asturias tocó retomar el tema mar, acompañado esta vez de mi colega Ramiro, buen pescador de truchas y reos en el rio,  al que tenía prometido una salida en barco ya que es una pesca que desconocía. La intención era tentar a las lubis pero como viene siendo habitual por mi zona, ni rastro, probamos un poco al principio de la tarde y otro poco al atardecer, y nada ni un toque. Afortunadamente en el mar siempre hay alternativas asi que le propuse ir a hacer un jigging ligero con jigs y vinilos entre 40 y 100 grs a ver si pescábamos algún abadejo y unas caballas. Dicho y hecho nada más llegar a los pesqueros las picadas se sucedieron, incluso hubo algún doblete guapo como le de la foto con abadejos kileros que dieron una buena pelea. Al final pesca variada, llegamos a contar hasta diez especies (caballa, caballa japónica, abadejo, jurel francés, jurel gallego, cabras, doncellas, lavancos, bolos, rubio), y todo con un aparejo con un vinilo o jig y unas plumas, sencillo y muy efectivo, a la par que tremendamente divertido. Ramiro quedó enganchado pues las continuas picadas hace que pases una fantástica tarde de pesca en espera de especies de más categoría.......